La redada pandilleril en la Junta Central de Aguas sumó otro delincuente de cuello blanco.
El Director comercial de la JCAS ,Gilberto Baca,  es el tercer ejecutivo en ser despedido en conexión con el asesinato de René Villanueva, artifice de fraude millonario al Congreso Local.
Baca es una de las personas más cercanas a Roberto Lara, quien apenas hace dos dias renunció a la presidencia de la JCAS.
Además de Lara se ha dado la salida de  funcionarios que operaron contratos fraudulentos de obra de la Junta Municipal de Agua y Saneamiento de Chihuahua e inversiones en Aras.
Siguen fugitivos dos de los principales operadores, Jorge Issa y Manuel Soledad, administradores del Congreso del Estado en la pasada legislatura.